-Hey Johnson, ¿vienes con tu mascotita?-dijo Michael señalándome con la cabeza-Que por cierto, ¡es tan sexy!-dijo mientras me miraba morbosamente, no podía ocultarlo, tenia miedo, las piernas me temblaban, y no necesariamente a causa del frío-Apuesto que ya te la tirastes, ¿a que si?-dijo el mientras me miraba...de una manera asquerosa. Pude notar como Jordan se tensaba a mi lado. Mis manos se volvieron puños.
-¡Vete al diablo, Michael!-le grito Jordan furioso. Camino hacia Michael y le planto un golpe en toda la cara. Michael lo miro enfurecido y le devolvió otro golpe en la cara que lo hizo retroceder. Grité del espanto. La cara de Jordan estaba sangrando, pero eso no lo detuvo. Volvió a pegarle, y Michael se la devolvió otra vez. Así esto se transformo en una pelea bastante fea.
Puse mi mano en mi boca para reprimir otro grito. No aguantaba ver como herían a Jordan, todo por mi culpa, era realmente doloroso. Tendría que alejarme de el...Pero, ¿que estoy diciendo? ¿Alejarme de el? No soy capas, el es como... ¡Mi sol que sale toda las mañanas! Sin el caería. Aunque seria lo mejor.
Mire a un grupo de chicos que se acercaban, reconocí uno de ellos como Austin. 'Mi segundo mejor amigo'. ¡Este chico era realmente una locura! Su vida era, un enredo total. Era el mejor nadador del instituto. Sus padres se habían separado hace mucho. Mientras el estuviera conmigo, yo estaba bien. El tenía el cabello amarillo, liso y con el típico corte moderno, sus ojos eran grises, eran profundos, y con solo mirarte, te trasmitía todo lo que tenia que decir. Era musculoso, ya que iba al Gimnasio todos los días. Los chicos venían corriendo hacia nosotros, como si ya supieran que pasaría esto. Austin vino hacia mí, y me miro preocupado. Claro, no debía de tener el mejor aspecto ahora.
-¿Estas bien, Cam?-me pregunto preocupado, mientras me envolvía en sus brazos. Tenía frío, y mucho miedo. Busque a Jordan con la mirada y ni rastro de el. Me separe de Austin y mire a todos lados casi desesperada. Austin agarro mi mochila del suelo y la sacudió.
-¿Donde esta Jordan?-le pregunte nerviosa. El me sonrío un poco. Se monto mi mochila en el hombro.
-Se fue a su casa-dijo encogiéndose los hombros. Lo mire aterrorizada, si se iba a su casa, su madre lo vería así, Jordan diría que fue por que me trato de defender, su madre se enfadaría y le prohibiría estar conmigo, y mi vida caería como del cielo al infierno en segundos. El negó con la cabeza-Su madre no esta en casa, esta en un viaje de negocios-dijo mientras caminaba hacia mi casa. Yo lo seguí, sacudiéndome un poco la nieve.
Iba con los brazos cruzados, tratando de tener un poco de calor. Austin iba inmerso en sus pensamientos. Había un silencio algo incomodo. Luego de unos minutos siento una... ¿bola? de nieve en mi pierna. Mire a Austin fulminante y el solo río.
Me agache a agarrar una bola de nueve y cuando la iba a apuntar a Austin, me di cuenta de que estaba mucho mas lejos de lo que pensaba. Corrí a alcanzarlo, pero a pesar de que mi mochila no le permitía correr bien, iba mucho mas adelantado. En un momento paro y se interpuso en mi camino. Yo choque con el y caímos los dos en la nieve. El soltó un pequeño quejido, acompañado con una mueca. Sonreí en forma de disculpa y el me acaricio la mejilla, sonriendo.
Lo mire sin comprender. El solo seguía sonriendo, mientras se acercaba mucho a mi rostro. Yo tenia la boca semi-abierta, gracias a mi inexperiencia con los chicos, pero el problema era: Este no era solo un chico, el era MI chico, mi mejor amigo.
Se veía sexy con nieve en el cabello. ¿Pero que digo? No debería de pensar eso. Sacudí mi cabeza en un entupido intento de sacar aquellas ideas, al parecer funciono, solo un poco, pero funciono. Con un torpe intento, me pare y le tendí la mano a el para que hiciera lo mismo.
Nos paramos. Su teléfono sonó, el lo saco de su bolsillo y lo miro atentamente.
-Lo siento Camila, tengo que irme. -dijo mientras me daba un beso en la mejilla. Le sonreí y seguí caminando hacia mi casa.
Al legar, rebusque en mi bolso, para encontrar las llaves. Escuche la voz de el. Si, de la desgracia de mi vida, aunque suene muy dramático. Gire la manilla con rabia y entre, luego se dar un portazo, anunciando mi llegada, no quería encontrarme con sorpresitas. Juan, el 'novio' de mi mama-aunque ella niegue cualquier relación con el-vino hacia mi.
-¡Camila! ¿Que haces aquí?-dijo aparentemente feliz. Odiaba verlo así, el con la felicidad que rebosaba de su ser y yo, con el odio a mil. Me mordí la lengua, para no decir nada, pero las ansias me gano.
-Esta es mi casa, ¿por que no puedo estar aquí?-dije con rudeza, cuidando cada una de mis palabras. Ya que la mirada fulminante de mi madre estaba en mi.
-No quise decir...-trato de retractarse, pero mi madre se puso a su lado y le susurro un 'Tranquilo'. Puse los ojos en blanco, ¿tenia que lidiar con esto?-Quise decir, te tengo un regalo...-dijo mientras rebuscaba entre sus pantalones, saco una pequeña cajita color rojo y la abrió para que yo admirara lo que hacia adentro. Era un collar, de plata, y tenia una pequeña flor de dije. Mire aquello y lo agarre. Le sonreí amargamente a el, mientras tiraba el collar al piso y lo pisaba, hasta que quedara hecho trizas.
Mi madre me miro furiosa. Desperté a la fiera. Solté una risita a tal pensamiento.
...
Adoraria si me comentaran(: ¡Quiero saber su opinion! Bueno, ojala y les guste el capitulo 3(: Adios!:D
